Los primeros pasos por el sendero de la Ternura los dan Laura Martínez-Jiménez, Ana Sánchez Tejedor y Belén Zurbano-Berenguer, que nos introducen en la comunicación feminista como un medio para relacionarnos, compartirnos y articularnos hacia la justicia social. Bajo el título "Ternura rabiosa: La comunicación feminista como forma de sostener-nos" nos invitan a introducir lo tierno en el centro de nuestros actos comunicativos, pues nos ayuda a reforzar los procesos de reconocimiento y encuentro para cuidarnos y resistir frente a las distintas formas de violencia de un sistema capitalista y patriarcal.

Sin embargo, las autoras nos advierten de no entender la ternura como un remedio para evadir la incomodidad y el conflicto que tiene que generar necesariamente el feminismo como espacio contrahegemónico. Lo que plantean es abordar estos malestares desde otro prisma: "defendemos que la ternura no resuelve ni obvia el conflicto, pero sí nos permitiría reconocerlo desde su dimensión afectiva, así como acuerparlo con empatía, respeto y contexto".
Por ello, en el capítulo nos hablan de ternura rabiosa, como un marco que nos ofrece "la posibilidad de afectarnos, en otras palabras, de comunicar-nos para con-movernos hacia otras maneras de procurar y sostener la vida en todas sus formas".

Desde esa ternura rabiosa, Laura, Ana y Belén reivindican y practican la comunicación feminista por su "poderío transformador" pues imagina mundos posibles para construir escenarios donde las vidas (buenas) sean vivibles. Como las propias autoras expresan: "La comunicación feminista la concebimos como concebimos los proyectos feministas: colectivos, plurales, libres, poderosos y empoderantes. Rabiosamiente tiernos en las alegrías que generan y en los dolores de los que en ocasiones nacen".
Este capítulo forma parte del libro Enredándonos por unas vidas vivibles que está disponible bajo licencia Creative Commons y bajo descarga libre en nuestra página web o en la página del proyecto www.municipioscuidadores.org/descarga.

¡Y recuerda Enredándonos por unas vidas vivibles forma parte del proyecto Municipios Cuidadores!
En la guía La sostenibilidad de la vida como faro municipal se recogen cinco senderos para buscar estrategias locales que cuiden de las personas y el entorno (¡puedes descargártela de forma libre aquí).
Además, todo este proceso se recoge en la web del proyecto:

Municipios cuidadores es un proyecto de Aradia Coop. financiado por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030.
